Han trabajado tanto por hundir sus bancos y cajas que se merecen una Prima cono nuestra heroína La Prima de Riesgo.
Pero el dinero acaba con todo tipo de sentimiento y de vergüenza y ha hecho a estos pobres diablos unos infelices que solo aspiran a defraudar en sus declaraciones de la rente y abrirse una cuenta en suiza...
Cuando la Prima vuelva de su secuestro aturdida por el síndrome de Estocolmo pondrá en su sitio a estos infelices...
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